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CARMEN VELASCO
Jueves, 2 de octubre 2014, 00:17
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La cultura tiende a extinguirse. A hacerse tan pequeña que quién sabe si acabará desapareciendo. La cultura está en zona de peligro. Luz roja. Se han encendido las alarmas. No son frases hechas, sino sentencias firmadas con datos. La estadística certifica la mala salud del cine, teatro y música. ¿El verdugo? La crisis, el IVA al 21%, las medidas del Gobierno... Casi todos los indicadores culturales justifican las movilizaciones de actores, músicos y artistas, que representaron el funeral de como protesta a la conocida como ley Lasalle el pasado martes en Madrid.
¿Hay motivo para salir a la calle? Con el Anuario SGAE 2014 en la mano, sí. El pasado año resultó nefasto para el consumo cultural. Fue el primer ejercicio completo con el IVA al 21%, el feroz enemigo que contrae la demanda y condena a una caída sin freno sectores como el cine y la música. En la Comunitat, el público deserta del patio de butacas y no se refugia en una sala de conciertos.
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