El sector del taxi anuncia movilizaciones contra la ley del Consell

La aprobación de la nueva ley, según Arráez, "va a provocar centenares de despidos de trabajadores y una gravísima limitación de derechos al autónomo taxista". La unión de asociaciones carga directamente contra el PSPV. La titular de la conselleria es la socialista María José Salvador, con quien la Unión no ha logrado llegar a un acuerdo durante la tramitación de la ley, muy accidentada en su periodo de enmiendas. La portavoz en Les Corts del PP, Isabel Bonig, anunció este martes que en la última comisión donde se trató la normativa se produjo una "vulneración del reglamento" de la Cámara al aceptar enmiendas una vez finalizado el periodo de debate. "Se saltan el reglamento", apostilló Bonig al referirse a una comisión donde el PP y Ciudadanos se sumaron a Podemos a la hora de realizar una serie de enmiendas a la normativa, además de rechazar una veintena de modificaciones propuestas por el PSPV y Compromís, los partidos que avalan la nueva ley.

Arráez considera que se ha producido "un diálogo de sordos con las asociaciones mayoritarias del sector", por considerar que la consellera Salvador "ha ninguneado hasta extremos jamás vistos, con mas de 200 enmiendas presentadas por grupos parlamentarios y asociaciones , sin estudios previos de necesidad, , en contra del informe del Comité Económico y Social de la Comunidad Valenciana". Para la entidad que reúne a buena parte de las asociaciones de tasistas, la nueva ley supondrá que los taxistas que tienen contratado un conductor asalariado lo tengan que despedir; que no puedan mantener su licencia después de la jubilación o teniendo una incapacidad permanente tal y como sí reconoce la ley de la Seguridad Social; que los hijos e hijas de los taxistas que fallezcan queden completamente desprotegidos; y que quien tenga más de una licencia adquirida y otorgada legalmente por herencia o compra, no pueda explotarla con conductores, creando empleo".

Igualmente, se advierte que la aprobación de la nueva normativa supondra que "desaparece la garantía jurídica de que la licencia tenga carácter indefinido, así como la limitación de "la capacidad de competir con las empresas de vehículos con conductor (VTC) en igualdad de condiciones".

"Mientras que la anterior ley fue consensuada por todos los interesados (taxistas, usuarios y administración) no era polémica porque reconocía los derechos de todos y fomentaba el trabajo autónomo, nadie puede comprender la cruzada emprendida por Ximo Puig (dado que es un empeño personal) en generar conflicto donde no lo había e imponer un modelo de taxi sobre el que los tribunales ya se han pronunciado en contra en otras comunidades, provocando la movilización del sector, conflictividad social y un enorme perjuicio para los taxistas autónomos", indica el Arráez, por lo que asegura que los profesionales "profundamente dolidos anuncian movilizaciones y un largo recorrido judicial si al final se consuma este atropello".