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Vista del litoral de Benidorm. reuters / Heino Kalis
El plan de protección del litoral deja en el aire 15.000 viviendas

El plan de protección del litoral deja en el aire 15.000 viviendas

Siete grandes proyectos urbanísticos quedarán anulados si no se ejecutan en los próximos cinco años

JUAN SANCHIS

Valencia

Martes, 15 de mayo 2018, 01:10

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La Conselleria de Vivienda y Ordenación del Territorio se propuso al inicio de la legislatura pasar página al modelo urbanístico anterior, que llegaron a calificar de «depredador». Durante los últimos años el Consell ha dado luz verde a diversas normas que han invertido la situación. La última ha sido el Plan de Acción Territorial de Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), aprobado hace diez días y que entró en vigor el pasado viernes tras su publicación en el Diari Oficial de la Generalitat.

Este documento inicia la cuenta atrás para enterrar de forma definitiva el modelo urbanístico anterior. El Pativel pone fecha de caducidad a los siete grandes planes urbanísticos que están ya aprobados y pendientes de ejecución desde que estalló la burbuja inmobiliaria en la primera década del siglo en la Comunitat.

La nueva legislación urbanística aprobada por el Consell fija un periodo transitorio de un máximo de cinco años para iniciar el desarrollo de aquellos planes de actuación integrada (PAI) ya aprobados y que se encuentren dentro de la franja litoral de un kilómetro en la que ya no se puede construir. En caso de que no se ejecuten en este plazo, el suelo pasará a ser protegido y los PAI se anularán.

Esta disposición establece que los planes ya aprobados caducan en el plazo marcado por la legislación urbanística vigente hasta que entró en vigor el Pativel. Pero el inicio del desarrollo del planeamiento se tiene que realizar en el plazo de cinco años y la ejecución no puede demorarse más de otros cinco años.

Se trata de siete planes urbanísticos (dos en Castellón, cuatro en Valencia y uno en Alicante) que implican la construcción de más de 15.000 viviendas. Dos de ellos se encuentran en el municipio de Cullera. Son 'El Brosquil', que plantea 700 edificaciones y el conocido como el Manhattan, con 5.000 viviendas. Además, el proyecto prevé 33 torres de 25 plantas, dos hoteles de 40, un palacio de congresos y un puerto deportivo con 800 amarres. El Ayuntamiento está en estos momentos intentando renunciar a la figura de agente urbanizador, al considerar que no tiene los medios para poner en marcha un proyecto de estas características.

También en la provincia de Valencia se encuentra el PAI Rafalcaid, en la playa de Gandia. Está previsto que se desarrolle sobre una superficie de 67.890 metros cuadrados y prevé construir 136 viviendas.

Otro de los planes afectados es el PAI de Playa Puig, que plantea medio millar de viviendas. En las mismas condiciones se encuentra el de Cala Mosca en Orihuela, que programa la construcción de otras 1.500.

La provincia de Castellón cuenta con otros dos PAI. Doña Blanca Golf se extiende sobre una superficie cercana a los dos millones de metros cuadrados en Torreblanca y tiene planificado un campo de golf y unas 4.000 viviendas.

El PAI San Gregori Golf en Burriana plantea la construcción de más de cinco mil viviendas. Además del campo deportivo también incluye un centro comercial.

El Pativel prohíbe la construcción en una franja de un kilómetro desde la ribera del mar. Fuentes de la Conselleria de Vivienda y Vertebración del Territorio indicaron que dentro de la zona protegida todavía hay capacidad para la edificación de 180.000 viviendas en toda la Comunitat (100.000 en la provincia de Alicante, 50.000 en la de Castellón y 30.000 en la de Valencia), lo que permitiría cubrir la demanda de los próximos cincuenta años al ritmo que mantiene el sector de la construcción en la actualidad.

Los municipios afectados por la entrada en vigor del Pativel y que están revisando su planeamiento municipal son: Alicante, Alboraia, l'Alfàs del Pi, Altea, Benicarló, Borriana, Cabanes, Castelló de la Plana, Dénia, la Llosa, Oliva, Orihuela, Oropesa, Peñíscola, el Poble Nou de Benitatxell, Valencia y Xàbia.

Fuentes de la Conselleria explicaron que desde noviembre de 2016 existe una moratoria urbanística que impedía a los ayuntamientos la aprobación de cualquier programa de actuación integrada, una disposición que se ha levantado con la entrada en vigor del nuevo planeamiento del Consell.

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