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El general Gan, ayer, en un momento de su conferencia de Aula LAS PROVINCIAS en la sede de Capitanía, junto al jefe de Opinión del periódico, Pablo Salazar. JESÚS SIGNES
«En seguridad es más difícil ponerse de acuerdo en la UE que en la OTAN»
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«En seguridad es más difícil ponerse de acuerdo en la UE que en la OTAN»

El general Francisco Gan defiende la disuasión como «la mejor forma de evitar conflictos» bélicos «y no sólo con carros de combate o armas»

Martes, 12 de junio 2018, 00:41

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«A finales de los 90 pensábamos que ya no habría más guerras. Hoy percibimos inquietud e inseguridad en las fronteras de la OTAN». Es el panorama que ayer describió el teniente general Francisco Gan (Figueres, 1958), jefe del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, durante la conferencia 'España y su entorno geopolítico' que ayer ofreció ante un abarrotado Salón del Trono del Convento de Santo Domingo, sede de Capitanía.

Al acto asistieron, entre otros, el presidente del Consejo de Administración de LAS PROVINCIAS, Gonzalo Zarranz, y el director general de Emergencias, José María Ángel.

Gan comenzó analizando España desde su posición geográfica. Para el alto mando de las Fuerzas Armadas «todo lo que sucede en el mundo repercute al instante en nuestro país con mayor rapidez que nunca». Destacó los escasos 14 kilómetros que nos separan de África y que las fronteras con Ceuta y Melilla marcan el mayor contraste económico del mundo. «El poder adquisitivo es 16 veces inferior a un lado de la valla que al otro, uno de los puntos de mayor desigualdad».

Según el teniente general, España ha sido y es «bien recibida en el mundo», destacando «su difusión de cultura desde el siglo XVI». En general, dijo, «es un país que genera confianza». Para el experto en geopolítica, Europa «es nuestro entorno de mejora y un estado europeo unificado sería perfecto, pero desgraciadamente no es así».

Además, «todo lo que sucede en el Norte de África y Oriente Medio nos repercute», expuso. Puso el ejemplo del gas que consumimos, «que procede de Argelia y pasa por Marruecos». Y en esta zona, resaltó, «preocupa los movimientos salafistas yihadistas». Y en el África subsahariana, incidió Gan, «la clave está en el Sahel». Se mostró especialmente preocupado por los «movimientos violentos muy sanguinarios» en países como Mali, Nigeria o Costa de Marfil. En cuanto al terrorismo, destacó un dato: «el 95% de los muertos en atentados yihadistas son musulmanes».

En cuanto a las relaciones con Estados Unidos, habló con franqueza: «Con Estados Unidos hay que llevarse bien, no siempre diciendo que sí a todo, pero sí teniendo un buen equipo para jugar». Y China, dijo, «ya no es el país del todo a cien, sino un gran líder tecnológico».

Amenazas y desafíos

El jefe del CGTAD abordó las que, desde su análisis, son las principales amenazas para España. Habló de un yihadismo «que conviene atacar en sus orígenes», pero también de los ciberataques. En general, cree que la mejor estrategia para evitar los conflictos bélicos es la «disuasión», entendida como ese respeto a las consecuencias que frena un eventual ataque. «Eso se logra con carros de combate y armas, pero también con política y otros muchos medios». Por ejemplo, los ejercicios militares en zonas fronterizas o la presencia y vigilancia de fuerzas en puntos críticos.

Los terroristas, advirtió, «pueden llegar hoy a acceder a armas de destrucción masivas». Y el crimen organizado, lamentó, «tiene en algunos lugares un poder suficiente como para infectar y desestabilizar un país entero». Y puso el ejemplo de Méjico con el narcotráfico.

Entre los desafíos para España, Gan también citó la inmigración. Y no pasó por alto el asunto de mayor actualidad, el ofrecimiento del presidente Sánchez para traer a Valencia el 'Aquarius'. «Es imposible no conmoverse ante el problema de la inmigración y lo primero es auxiliar a quien puede morir ahogado. Pero no se soluciona por traer a 600 o a muchos más inmigrantes. El altruismo realmente efectivo sería la solidaridad en los países de origen, ayudándoles a proporcionar desarrollo, autonomía y seguridad».

El alto mando calificó la OTAN como una organización «solidaria y defensiva, no ofensiva». Y aseguró que en cuestiones de seguridad «es más difícil ponerse de acuerdo en la Unión Europea que en la Alianza Atlántica».

Gan conoce bien los polos terrestres. Los ha pisado en sus expediciones. Y aseguró que el cambió climático o el deshielo es «una realidad que ya está afectando directamente a los países y tendrá repercusión en migraciones». Al mismo tiempo, resaltó la «vulnerabilidad energética». «Nuestro nivel de tolerancia a la falta de luz o agua es bajísimo». En sus conclusiones, destacó que España es «especialmente solidaria» con el aporte de fuerzas a misiones internacionales».

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