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Cartel mostrado en la manifestación contra el decreto de plurilingüismo organizada el día 19 en Alicante. :: manuel lorenzo/efe
El 70% de los colegios se verán afectados por la suspensión del plurilingüismo de Vicent Marzà

El 70% de los colegios se verán afectados por la suspensión del plurilingüismo de Vicent Marzà

Los centros que cambiaban el peso de las lenguas volverán al sistema anterior si el curso que viene se mantiene la paralización

JOAQUÍN BATISTA

Viernes, 26 de mayo 2017, 11:48

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La suspensión cautelar del modelo lingüístico de los colegios dibuja un escenario distinto para el curso que viene. Si en septiembre sigue paralizada su aplicación, el 72% de los centros deberá renunciar al peso de las lenguas de enseñanza en sus clases previsto hasta el miércoles, cuando se conoció la medida del TSJCV tras la petición de la Diputación de Alicante. Es decir, mantendrán la organización actual, derivada del decreto de 2012, sensiblemente distinto.

El porcentaje se extrae del volumen de centros públicos y concertados que, en base al sistema impugnado, optaron por elegir un nivel más elevado que el que venían aplicando en los últimos cursos. Es decir, aumentaron las horas en valenciano y en inglés, que van de la mano, de cara a su implantación en Primaria, donde la presencia de la lengua extranjera ya varía en función de cada nivel (en Infantil es similar). Los que se han mantenido en los mismos parámetros no se ven afectados por la incertidumbre.

Las variaciones en el peso de las lenguas es sólo una de las consecuencias que se darían en caso de mantenerse la medida, tal y como señalaron los directores consultados ayer, que también apuntaron que la paralización puede influir en la elección del material a utilizar, pues el libro o ficha en el caso de Infantil debe corresponder con la lengua en que se imparte la asignatura o ámbito. Además aludieron a la dotación de recursos para aplicar el modelo paralizado, a la posible reorganización de aulas en los colegios que vuelvan al sistema de doble línea, que desaparece, o a la exposición al inglés en 1º de Infantil.

Todos los centros debían aplicar en septiembre el decreto en la citada etapa, al menos en las aulas de tres años. Para hacerse una idea de la diferencia entre los dos decretos sirve la comparación entre un programa plurilingüe en castellano del modelo anterior y un Intermedio 1 o 2, que ha sido un cambio bastante implantado. El primero fijaba un mínimo de cinco horas semanales vehiculadas en valenciano, mientras que en los segundos debe oscilar entre ocho y nueve. Si se ha pasado a un Avanzado, cuya lengua base es la propia, la diferencia se agranda. La directora de un concertado de Valencia ponía el acento ayer en la incidencia que puede tener la aplicación de un modelo u otro en los horarios o en las programaciones didácticas de los ciclos.

Desde otro centro de la capital se refirieron al problema del inglés en las aulas de tres años, pues todas se adaptarán. El decreto de 2012 generalizó la exposición a la lengua extranjera (al menos hora y media a la semana) ya a esta edad, mientras que el nuevo, el paralizado, la aplazó a los cuatro al considerarlo una mejora pedagógica que facilitaba la adaptación del pequeño a la escuela. La directora citada señalaba que en función de la normativa en vigor habrá que decidir si al profesor capacitado para dar inglés se le atribuyen horas o no en este nivel.

Los tiempos

No se puede olvidar que hay colegios que han optado por adelantarse al calendario de aplicación del decreto y también adaptarán la Primaria, que sí se estructura por asignaturas, por lo que también habría variaciones en el peso de las lenguas en cada asignatura dependiendo de cómo quede la resolución del TSJCV.

En este sentido, fuentes jurídicas señalaron que es complicado prever los tiempos que se manejarán, pues la resolución del recurso que presentará la conselleria que tiene hasta el día 31 para oficializarlo puede depender de factores como la carga de trabajo de la sala, si bien añadieron que estos asuntos suelen tener prioridad. En otras palabras, se confía en que de cara al nuevo curso se sepa qué normativa estará en vigor. Es más, el único escenario que contempla la conselleria es la presentación del recurso y su aceptación, y según fuentes del departamento, a día de hoy no se baraja ninguna alternativa adicional o plan B.

Además, la directora de un centro público de Castellón se preguntaba qué pasará con las dotaciones del Plan de Actuación para la Mejora (PAM), que preveía "recursos humanos para áreas en inglés o si existía un déficit docente en valenciano", pues ya están aprobados y se vinculaban al modelo lingüístico, e insistió en que los claustros pueden tener dudas sobre qué libros o materiales utilizar en función de la lengua. También destacó que se genera "malestar" pese a que los niveles los eligió la comunidad educativa.

Los tres directivos coincidieron en los efectos de la suspensión en la admisión. "A nivel individual podría provocar quejas de padres que hicieron la solicitud para un programa y se les aplicará otro", señaló la última, mientras que desde Valencia destacaron que "a las familias que vinieron el lunes les dijimos que había unos niveles y hoy (por ayer) les decimos otros". También señalaron que en caso de reorganizar las aulas en base al decreto de 2012 deberá ser la conselleria la que establezca la forma de proceder.

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