El ruido que genera un hogar de jubilados enfrenta al alcalde de Villalonga con los vecinos

El ruido que genera un edificio multiusos en Villalonga, donde hay un bar de jubilados, crispa los ánimos de más de un centenar de vecinos de esta localidad de la Safor. El inmueble en cuestión está ubicado entre las calles Pujà de Fielato y avenida de L'Orxa, donde se alternan viviendas unifamiliares y edificios de varias alturas.

En ambas calles residen más de 120 personas y todas coinciden en una cosa: «El ruido que genera el edificio es insoportable», como indicó uno de los residentes de estas vías.

Tanto él como el resto de vecinos han mostrado sus quejas al Ayuntamiento y aseguran que el inmueble «carece de licencias y que no está insonorizado». «No está adaptado para las actividades que se desarrollan allí y por eso molesta tanto», matizaron.

Este edificio se construyó para albergar el Llar dels Jubilats, pero finalmente acoge en la planta baja un bar para personas mayores del pueblo, pero del que hacen uso «todos los vecinos que quieren». «Los precios son asequibles y mucha gente del pueblo lo utiliza como si se tratase de un bar normal», precisaron.

Las plantas superiores se dedican a actividades de grupo, en su mayoría deportivas: «Hay zumba, aeróbic y flamenco y la música se oye a todas horas desde varias calles cercanas».

Los vecinos han pedido hasta en seis ocasiones, por escrito, al alcalde, Enric Llorca, del PSPV, que el inmueble «cumpla la normativa, cuente con permisos y sea insonorizado» y afirman que no ha respondido a ninguna de estas peticiones que se han cursado desde julio de 2016.

Es más, incluso, algunos vecinos han llegado a protestar en los plenos por las molestias que genera el espacio multiusos y han reclamado en público al primer edil que tome cartas en el asunto.

Llorca, por su parte, dijo que en estos casos «no es habitual que los recintos municipales tengan licencia, ya que son propiedad del consistorio». Aún así aseguró que el gobierno local está trabajando para solventar esta cuestión de la forma más rápida posible.

El primer edil añadió que el inmueble se construyó hace unos diez años, antes de él ser alcalde, para dar servicio a los mayores del municipio y a colectivos del pueblo y eso es «lo que está haciendo».

Además agregó que el gobierno iniciará en breve unas obras para mejorar todo el espacio y adaptarlo a la normativa actual e insonorizarlo: «Disponemos de 35.000 euros de una ayuda que hemos recibido. El proyecto está adjudicado y la actuación puede comenzar en unas semanas».

Remarcó que quiere que el edificio cumpla con la normativa actual y, entre otras obras, se habilitará un aseo para minusválidos en el bar de la planta baja.

Llorca dijo que todas estas quejas provienen de un grupo de personas «que pertenecen a Compromís» y que sólo buscan hacerle daño: «No voy a consentir que se ataque a los más mayores, que cuentan con todo mi apoyo». Finalmente dijo que estas calles son tranquilas, pero hay personas que no toleran «ni que haya gente en la acera hablando».