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Alumnos de un centro concertado en clase.
Nueva ofensiva de la Conselleria de Educación contra los colegios concertados

Nueva ofensiva de la Conselleria de Educación contra los colegios concertados

El departamento de Marzà endurece aún más las condiciones para poder conveniar unidades de Bachillerato

JUAN SANCHIS

Jueves, 13 de abril 2017, 21:54

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La Conselleria de Educación ha dado una vuelta de tuerca más a los centros concertados. En esta ocasión le ha tocado el turno al Bachillerato. El departamento de Marzà publicó este miércoles en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) una corrección de errores de la ratio media por municipios necesaria poder concertar más de una unidad de Bachillerato que en la práctica supone una nueva ofensiva contra estos colegios.

El cambio ha supuesto un incremento de la ratio en el 75% de los municipios afectados (116 de 153 centros con alguna unidad concertada), que en algunos casos ha alcanzado los 35 alumnos, una cifra que tanto patronal como sindicatos han considerado excesiva.

Por el contrario, Educación ha mantenido las ratios en el 22% de los casos y no la ha cambiado en el 3,2% de las localidades con unidades concertadas.

En cualquier caso la resolución, que no es más que una corrección de errores de la publicada a principios de marzo, viene a endurecer todavía más las condiciones para que los centros puedan concertar las unidades de Bachillerato, que son ya de enseñanzas no obligatorias. Además se ha hecho «con oscurantismo» y sin ningún tipo de negociación con los afectados, según los sindicatos.

Tanto la patronal como los sindicatos han coincidido en señalar que no entienden cómo la Conselleria de Educación ha tardado casi dos meses en publicar una corrección de errores de tanta importancia, además de llamar la atención sobre el hecho de que la resolución se haya publicado justo el día que terminan las clases ante las vacaciones de Semana Santa.

La resolución incluye ratios que superan en varios casos los 30 alumnos por aula, aunque la más elevada se encuentra en el caso de Gata de Gorgos donde alcanza los 35 alumnos por unidad con un incremento de 16 alumnos. También llama la atención el caso de Albaida donde para poder concertar la segunda unidad de Bachillerato es necesario tener 33 alumnos frente a los 23 que se exigía en la resolución original de marzo.

En concreto, la ratio supera o iguala los 30 alumnos por aula en 21 municipios, diez en Alicante, otros tantos en Valencia y uno en Castellón.

De los 55 centros con alguna unidad concertada en Bachillerato en Alicante, la corrección de errores dispone un incremento en 39 municipios, el 70% de los casos, un aumento que en casos llega a los 16 alumnos, como en Gata de Gorgos.

El endurecimiento de la política de conciertos de la Conselleria es más duro proporcionalmente en Castellón donde se ha producido un incremento en el 88% de los municipios donde la ratio se ha incrementado hasta en 10 alumnos.

La provincia de Valencia cuenta con 80 centros con alguna unidad de Bachillerato concertada de los que el 76,2% en la corrección de errores de la Conselleria publicada ayer experimentan un alza, en algunos casos de forma muy significativa.

En las tres capitales de provincia se han incrementado las ratios. En Alicante se exigían 26 por aula y ahora, 29. En el caso de Castellón la subida es de un alumno al pasar de 26 a 27 mientras que en Valencia se aumenta el número por unidad de 28 a 31.

El aumento también se produce en las ciudades donde la educación concertada tiene mayor tradición. Como en el caso de Elche, donde la ratio se incrementa en 3 alumnos. En Gandía son cuatro más, la misma cantidad que en Torrent.

Fuentes de FSIE mostraron su indignación por la decisión y han pedido una reunión urgente con el con el director general de Política Educativa, Jaume Fullana, para que les explique a qué se debe la corrección de errores y cuáles han sido los criterios para establecer la ratio.

Según el decreto que rige los conciertos, publicado en enero, la primera unidad de bachillerato se concierta a partir de los 25 alumnos. Si el centro quiere acordar con la administración un mayor número de aulas tendrá que aplicar la ratio que establece la Conselleria de Educación para cada uno de los municipios. Si no la alcanza no lo obtendrá.

Desde FSIE consideraron que si ya se esperaban que se perdieran unas 80 aulas, con el nuevo decreto la cantidad se puede incrementar en el entorno de unas 40-45 unidades más.

De esta forma, de las 450-500 unidades concertadas de Bachillerato que existen en la Comunitat se pueden perder de un centenar de aulas para el próximo curso. El sindicato recuerda que la eliminación de los conciertos conllevará la supresión de puestos de trabajo, no sólo entre los docentes sino también entre el personal de administración y servicios, ya que la ayuda económica de la administración será menor.

Las críticas también llovieron desde la patronal. La secretaria autonómica de Escuelas Católicas, Vicenta Rodríguez, destacó, en primer lugar, que parece que la pretensión de la Conselleria es hacer desaparecer aulas concertadas.

Rodríguez, además, destacó que la publicación de errores con tanto tiempo «muestra la forma de trabajar de la Conselleria, sin rigor y a veces parece que de forma precipitada». En el mismo sentido señaló que «debemos suponer que ahora no se ha cometido ningún error». Denunció que la corrección se realiza a pocas fechas del inicio del periodo de matriculación (el próximo 5 de mayo) sin casi tiempo de reacción.

José Manuel Boquet, presidente de la Federación de Centros de Enseñanza (Feceval), explicó que la Conselleria de Educación ha hecho las correcciones mayoritariamente hacia arriba con medias de 31, 32 o 33 alumnos. «Me parece que ha actuado unilateralmente, sin consultar y lo que tendrán que hacer ahora es explicarnos de dónde se han sacado estas cifras», indicó.

Además, puntualizó que «no queremos prejuzgar mala voluntad en la Conselleria» pero el cambio se ha hecho dando poco margen de maniobra a los centros para que den su opinión.

Los centros concertados tienen previsto mantener la próxima semana una reunión con la Conselleria de Educación para que les expliquen los cambios. En este sentido, todos los implicados en la comunidad educativa explican que se está haciendo todo con demasiada premura y acortando los tiempos y dejando poco espacio para maniobrar. Temen por ello que empiece el periodo de matriculación y aún no esté clarificada la situación.

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