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Ó. DE LA DUEÑA
Sábado, 3 de octubre 2015, 23:29
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El bipartito de Real de Gandia ha suspendido la reforma de la calle Párroco Berenguer en contra del criterio de más de 300 vecinos. El ejecutivo local, compuesto por el PSPV y Compromís, ha decidido dejar sin fecha esta actuación pese a que ya estaba en fase de contratación y algunas empresas habían presentado sus ofertas.
Esto ha generado un enorme malestar entre los residentes de Real, que no han dudado en movilizarse para recoger firmas y exigir a la alcaldesa, Marta Signes, para que ponga en marcha esta actuación «cuanto antes» y evitar así los problemas de inundaciones que se producen cuando hay fuertes tormentas. La actuación se aprobó en la pasada legislatura, como explicaron los vecinos de esta céntrica calle, y se dispuso una partida de 567.000 euros.
El proyecto fue consensuado entre el anterior gobierno y los residentes de Párroco Berenguer. «Fueron muchos meses de negociaciones y finalmente dimos con un planteamiento de obra que satisfacía a todos los vecinos», como indicó Jorge Simó, uno de los residentes.
La obra iba a afrontarse con una partida de fondos municipales que el anterior ejecutivo ya había previsto. La idea que los vecinos plantearon era la «de una reforma integral» de la superficie y la sustitución de las viejas tuberías de agua «de fibrocemento» por otras más modernas. También se contemplaba la mejora de la red de saneamiento para darle más capacidad y evitar los problemas de inundaciones.
«Por esta vía antes pasaba una acequia y cuando llueve se acumula el agua y hay problemas en las viviendas», relató Simó. Además, los residentes exigieron que no se ubicara mobiliario enfrente de las casas, pero sí en la zona del nuevo ayuntamiento. En esta parte se decidió poner bancos y plantar árboles.
Pero la llegada del bipartito a Real de Gandia truncó todos estos planes. El gobierno de Signes decidió aplazar la actuación. De hecho, cuando el actual ejecutivo anunció «la paralización» temporal se topó con las quejas de muchos residentes en el pleno del pasado mes de julio. Ahora los propietarios de casas de varias calles de Real han decidido unirse y exigir mediante firmas a Signes que recupere el proyecto consensuado y que lo ejecute. La alcaldesa confirmó que su gobierno ha decidido no llevar a cabo esta obra tal y como se concibió en la pasada legislatura.
Signes reconoció que la actuación planteada se ha suspendido. Afirmó que el gobierno actual realizará un nuevo proyecto para esta vía, aunque no se adapte a las peticiones de los vecinos. La alcaldesa dijo que los técnicos están trabajando en la redacción de un nuevo planteamiento, pero no supo dar fechas de cuándo estará acabado o de cuándo podrían comenzar las obras.
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