El PP acusa al bipartito de dejar al municipio sin ninguna inversión para el próximo año

El grupo Popular de Almoradí rechazó ayer la propuesta del bipartito de modificar el Plan Económico Financiero 2016/2017 para adecuar el gasto del Ayuntamiento porque considera que el municipio se queda el próximo año exento de inversiones municipales. PSOE e Izquierda Unida se han visto obligados a variar el esquema económico municipal debido a un desajuste que se produjo en la liquidación del 2015.

La falta de ahorro en el pasado curso económico ha obligado al gobierno local a que en el cierre del presente año y del próximo deba ahorrar más de 756.000 euros, que se han tenido que recortar en el gasto corriente y en inversiones. La portavoz del PP, María Gómez, consideró que el plan financiero «nos lo han dado solo con una semana de antelación y no nos han pedido opinión. Si lo queremos bien y si no también», criticó.

La popular señaló que «cuando se incumple el gasto, se debe quitar el desequilibrio de esa partida». En el grupo de la oposición valoraron que la responsabilidad es de quien gobernó en el 2015 porque el gobierno de coalición de izquierdistas y socialistas «se dedicó a gastar sin un aparente control de las cuentas, con contrataciones como las del taller de empleo y sin mirar la regla que marca unos límites bien definidos que no se pueden sobrepasar».

Gómez opinó que no se va a poder llevar a cabo tampoco el ajuste que marca el plan en el próximo año puesto que «con los datos que nos aportan no es factible», y añadió que «solo tenemos los números que nos han dado y no conocemos más sobre las previsiones pero también es posible que el ahorro que se debe hacer este año de 170.000 euros tampoco se logre en el cierre del ejercicio».

Así las cosas, los populares observaron que en el próximo año van a decrecer las inversiones y las pequeñas actuaciones urbanas que sufraga el Consistorio puesto que el cinturón debe apretarse al máximo. Para la portavoz del PP los actuales responsables municipales no estudiaron bien la situación económica de las cuentas públicas al confundir gasto corriente con inversiones.

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