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ALBA M. GARCÍA
Sábado, 6 de febrero 2016, 00:39
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Una mujer de 77 años falleció ayer en un incendio que se produjo en su domicilio en Elche. El fuego pudo iniciarse, según las primeras investigaciones, como consecuencia de una estufa de butano que se encontraba en la salita de la vivienda, ubicada en el primer piso del número 18 de la calle Manuel Campello Ruiz en el barrio del Toscar.
Sobre las 10.20 de la mañana, vecinos del inmueble y transeúntes observaron que de la ventana de la vivienda salían llamas y gran cantidad de humo, que alcanzaban hasta los pisos de arriba. La alarma crecía entre los residentes, que se reunieron en la replaceta que da a la parte trasera de la vivienda y que dieron aviso al Parque Comarcal de Bomberos.
Los primeros en llegar al lugar fueron los agentes de la Policía Local, pero no lograron entrar en la vivienda. Los bomberos, al encontrarse que se trataba de una puerta blindada, tuvieron que acceder al interior del piso a través de una ventana. Una vez dentro, lo primero que hicieron fue buscar a los posibles ocupantes.
Hallaron a la mujer tendida junto a la puerta de la casa, y aunque fue atendida rápidamente por un equipo del Samu, nada se pudo hacer por salvarle la vida. Aparentemente, la mujer murió asfixiada por el humo mientras trataba de escapar de la vivienda. El fuego afectó a la salita y otras partes de la casa, que quedó afectada en su totalidad por la densa humareda, aunque no llegó a otros pisos.
Hasta el lugar del siniestro se desplazaron cuatro vehículos de bomberos (una autobomba, una autoescalera y dos vehículos de jefatura). Asimismo distintas unidades tanto de la Policía Local como de la Nacional, una ambulancia del Samu, otra del Servicio Vital Básico y una más del Ayuntamiento.
La mujer fallecida era soltera y vivía sola en el domicilio y, según comentarios los vecinos, padecía de mala visión y tenía problemas de movilidad, ya que se desplazaba con un andador. Asimismo, indicaron que aunque vivía sola era visitada con frecuencia por familiares suyos.
Tras certificarse su muerte y personarse la comisión judicial, el cuerpo de la fallecida fue retirado por los servicios funerarios para las pruebas forenses posteriores, mientras familiares de la víctima exteriorizaban su dolor y angustia por la pérdida, consolados por los vecinos.
En marzo del pasado año se produjo otro incendio en Elche, también mortal, en el que falleció una mujer octogenaria e igualmentecon problemas de movilidad. Sucedió en el número 41 de la calle Ruperto Chapí y otras cinco personas tuvieron que ser trasladadas a los hospitales General, Vinalopó e Imed por inhalación de humo y crisis de ansiedad.
El fuego afectó a las tres plantas superiores del inmueble, cercano a la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús. Según se apuntó entonces, el origen pudo estar en un microondas de la cocina, que ardió cuando estaba en funcionamiento.
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