Desalinizadoras en pausa

Uno de los objetivos marcados por el nuevo Gobierno de la Generalitat es poner en marcha, a la mayor brevedad posible, la batería de desalinizadoras proyectadas e impulsadas por el Ejecutivo nacional en 2004, en el marco del Plan AGUA, para tratar de combatir el endémico déficit hídrico que sufre la Comunitat, después de derogar el Plan Hidrológico Nacional que contemplaba el trasvase del Ebro.

Once años después, y tras recibir una inversión pública de más de 480 millones de euros, estas infraestructuras no están dando los resultados esperados. El elevado precio final del agua desalada, que encarece el recibo doméstico, y su cuestionable calidad hace que los agricultores valencianos sean reacios a utilizarla en sus campos de cultivo. Para tratar de reactivar su uso, a finales del pasado año en el Consell apostaban por incluir estas infraestructuras en el futuro Sistema Nacional del Agua impulsado por el Gobierno central y con el que se busca poner en común todos los recursos hídricos del país para redistribuir los elevados costes de producción del agua desalada en todo el territorio nacional.

Ahora, el nuevo Gobierno de la Generalitat quiere buscar soluciones «realistas, razonables y aplicables». El opinión del president Ximo Puig, «hay que optimizarlas y utilizarlas lo antes posibles, y que los costes sean los menos posibles», ya que, en su opinión, «estas inversiones en el futuro van a ser muy eficaces». «Eso sí es agua para siempre».

Por el momento, la media docena de dotaciones apenas cuentan con uso o siguen en un largo proceso de construcción.

Desalinizadora de Torrevieja

Seguirá en modo de pruebas durante todo el ejercicio

Con una inversión de 271,2 millones de euros, la desalinizadora de Torrevieja nace con el objetivo de completar el abastecimiento de los regantes del trasvase Tajo-Segura (unas 8.000 hectáreas) en periodos de escasez de recursos en la cabecera del río, y con capacidad para atender a una población de 440.000 personas. La infraestructura está en periodo de pruebas. Sin embargo, hasta principios del año que viene no comenzará a producir agua desalada, y lo hará a la mitad de su capacidad (80 hectómetros cúbicos al año).

Desalinizadora de Mutxamel

Activada de forma urgente para evitar cortes de agua

La infraestructura de Mutxamel, con un coste de 60,4 millones, nació para garantizar el abastecimiento de 200.000 vecinos de municipios de la comarca de L'Alacantí con una producción de 50.000 metros cúbicos de agua al día. Tras dos semanas de pruebas, se puso en marcha a mediados de mes para evitar cortes en verano en el suministro de Benidorm y otros municipios de La Marina Baja. Sin embargo, ha hecho falta un trasvase extraordinario Júcar-Vinalopó para completar el abastecimiento urbano.

Desnitrificadora de L'Eliana

Sin uso aunque la obra se terminó hace cuatro años

Con una inversión de 15,9 millones, las obras de construcción de la desnitrificadora de L'Eliana se terminaron en marzo de 2011. Desde entonces, y aunque busca garantizar la calidad del agua de la localidad, las disputas por su financiación entre el Ayuntamiento y la empresa pública Acuamed, encargada del proyecto, ha hecho que todavía no esté en marcha.

Desalinizadora de Sagunto

Construcción finalizada a falta de las canalizaciones

Para abastecer a 65.000 residentes de la comarca del Camp de Morvedre se destinaron 37,7 millones de euros a construir la desalinizadora de Sagunto. Aunque su construcción está finalizada y se encuentra en fase de pruebas, la falta de algunas conducciones hace que todavía no funcione a pleno rendimiento.

Planta de ósmosis de Moncófar

Continúan las obras para abastecer a Castellón

Para atender las necesidades de 120.000 vecinos del sur de Castellón se ideó la planta de ósmosis de Moncófar. Pese a recibir una inversión de 54,1 millones, aún está en construcción. El Diari Oficial de la Generalitat (DOCV) a principios de junio sacaba a información pública la solicitud de autorización y declaración de utilidad pública de una nueva línea eléctrica para abastecer a la planta, y para anunciar la ocupación temporal de terrenos. El miércoles pasado terminó el plazo de alegaciones.

Desalinizadora de Oropesa del Mar

La infraestructura sigue en estado de ejecución

Para satisfacer el incremento de la demanda que se producirá en Oropesa, Cabanes y Benicàssim se proyectó la desalinizadora de Oropesa del Mar, infraestructura que recibió una inversión de 63,2 millones de euros. La nueva dotación, aunque sigue en obras, pretende abastecer a una población de unas 150.000 personas. Para ello cuenta con una capacidad de producción de 65.000 metros cúbicos al día.