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R. A.
Viernes, 20 de marzo 2015, 01:00
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El parque de emergencias de Yátova amaneció ayer inundado de pintadas en las que se reivindica la readmisión de un compañero despedido hace casi dos años. 'Pantxo readmissió' y otros mensajes se podían leer en las paredes de todas las instalaciones, tanto en el exterior como en el interior, así como en puertas y vehículos. La autoría se desconoce pero no es la primera acción de este tipo que se realiza dentro de las delegaciones de la empresa pública Tragsa, responsable de las brigadas de emergencia. Aparecieron pintadas similares en otros parques, aunque las de Yátova parecen las más agresivas. Tras esos otros casos, como el de la Font Roja en Alcoi o el de Chelva, el propio afectado, Francisco Peralta se ofreció a limpiarlas. Sin embargo, la empresa obligó a los trabajadores en plantilla a borrar los grafitis.
El caso se remonta a 2012, tras el trágico incendio de Torre de les Maçanes, en el que perdieron la vida un brigadista y un agente medioambiental. Entonces, Francisco Peralta exigió la apertura de una investigación a fondo y la depuración de responsabilidades porque cree -al igual que muchos de sus compañeros que no salieron públicamente a denunciarlo-, que se cometió una «grave imprudencia».
La empresa pública le acusó de amenazar a un superior y le despidió. Denunció y un juez de Alicante declaró el despido improcedente, pero no ha sido readmitido hasta la fecha. Así que recurrió para que se declare nulo el fin de su contrato y así recuperar su puesto y la indemnización que le corresponde.
«No sólo no le readmiten, sino que la persona a la que exigió responsabilidades, y que ya ha declarado ante el juez, sigue trabajando en un puesto de jefe», explica un miembro de la brigada de Yátova en declaraciones a este diario. «Llevamos tiempo protestando, porque no es justo. Sólo pidió que se investigara un incendio mal gestionado que acabó con dos vidas», añadió, en alusión al guarda forestal o agente ambiental dependiente de la Conselleria de Medio Ambiente y al empleado de la brigada de emergencias. Francisco Peralta, Panxo, con residencia en Xixona, ha recibido muchos apoyos.
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