Interceptan una patera con once magrebíes frente a la costa de Santa Pola

Las costas alicantinas son de nuevo protagonistas del drama de la inmigración ilegal. Un pesquero detectó en torno a la medianoche del martes una embarcación en la que viajaban once personas, todas ellas hombres procedentes de Argelia, según su propia declaración, a unas 30 millas de Santa Pola. Los inmigrantes, la mayoría con edades comprendidas entre los 25 y 35 años, fueron escoltados hasta el puerto de Alicante, donde fueron atendidos por un equipo de la Cruz Roja y entregados a la Policía Nacional para tramitar sus respectivos expedientes de expulsión. Dos de los sin papeles adujeron que son menores de edad y así serán tratados legalmente, puesto que las pruebas radiológicas a las que fueron sometidos para confirmarlo no resultaron concluyentes, ni en un sentido ni en otro.

Tras el aviso del pesquero, un operativo del Servicio de Vigilancia de Aduanas llegó hasta la posición de la barca, de solo 5 metros de eslora y propulsada por un motor de 25 caballos de potencia, según ha trascendido. A bordo, los ocupantes llevaban consigo cinco garrafas de combustible, de 25 litros de capacidad cada una de ellas, cuatro de las cuales ya estaban vacías, según las fuentes consultadas por este diario.

Una vez retenido el bote, Salvamento Marítimo, movilizado ante la llegada de la patera, así como agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, desestimó por seguridad la opción de transbordar a las personas, según confirmaron fuentes de los servicios de emergencia.

Por ello, los once inmigrantes fueron escoltados directamente hasta las instalaciones portuarias de la capital alicantina, a las que llegaron en torno a las cinco de la madrugada, tras atravesar cerca de 70 kilómetros de mar Mediterráneo bordeando el litoral de Tabarca.

Los primeros reconocimientos realizados por los miembros sanitarios de Cruz Roja desplazados al Muelle 5 revelaron que todos se encontraban en buen estado de salud, por lo que no hubo que trasladar a ninguno de los llegados desde tan lejos a centros de salud. Sin embargo, el responsable del operativo de asistencia, Andrés Chessa, precisó que realizaron «alguna cura por contusiones leves».

Se trata de la segunda patera que arriba a suelo alicantino, pues en marzo las Fuerzas de Seguridad del Estado cazaron a dos inmigrantes sin papeles, ambos varones de origen magrebí, después de que presuntamente atracasen en la playa de El Torres de La Vila Joiosa. Su ropa mojada les delató, ya que en la embarcación ya no quedaba nadie cuando fue encontrada. Asimismo, la Guardia Civil investiga la procedencia de otra barca en la costa de la misma localidad en la que no fueron hallados los ocupantes.

No obstante, el de ayer fue el primer dispositivo de asistencia a inmigrantes llegados en patera que atiende Cruz Roja este 2014 en la provincia de Alicante. Un total de ocho voluntarios del organismo humanitario, entre traductores, conductores de ambulancia, enfermeros y técnicos en emergencias sanitarias, se desplazaron hasta el puerto alicantino. Además de tratar pequeñas heridas, los miembros de Cruz Roja les proporcionaron ropa nueva de abrigo y alimentación y bebida «para estabilizar niveles de glucosa», como apuntó el responsable del operativo.

Más tarde, pasaron a custodia de la Policía Nacional, que hoy mismo los trasladará al juzgado de guardia de Alicante para tomarles declaración.